Terminar
Es fácil y entretenido empezar cosas.
He empezado como 5 ó 6 novelas,
comenzado a escribir 2 guiones de películas,
pensado seriamente en hacer varios documentales, uno de ellos que empecé a grabar.
Pero son pocas las cosas que he terminado.
Y parece que no es fácil hacerlo.
Estas últimas dos semanas han sido de cerrar y abrir procesos.
Mostrar el documental, defender la tesis y, así, terminar mi vida universitaria.
Me acuerdo del primer día de clases el 13 de marzo de 2000. Haber llegado a esas casuchas rojas sin saber nada, pero nada de la vida. Después de 6 años y 3 meses puedo decir que aprendí algo.
No sé si aprendí de periodismo, pero si una que otra cosita de la vida que me puede ser útil en mi devenir por el planeta lideando con otros seres humanos.
Estuve varias veces a punto de irme y cambiarme de carrera. Pero no lo hice. Ahora agradezco haber tomado esa decisión que en ningún momento fue racional, pero tampoco lo que gané en la carrera son cosas medibles o tangibles. Son principalmente amistades, un lote de recuerdos increibles y miles de experiencias que no podría haber logrado en otros lugares.
El míercoles, después de defender la tesis, no estaba excesivamente contento, pero si tranquilo.
Muchas veces daban ganas de no despertarme, de quedarme en mi casa, de ir no ir a clases, porque cuando llegaba a la U el profesor no iba o las clases eran absolutamente innecesarias. Y aunque muchas veces estuve desmotivado, seguía, seguía, seguía y seguía... sin saber por qué.... quizás porque intuía que entre todas las cosas que había dejado a medio hacer había que terminar una.
Así el miércoles se había terminado, lo había terminado